A finales del año pasado, una joven pareja con tres niños nos encargó el proyecto de interiorismo de vivienda para su casa. Se trataba de una vivienda recién estrenada en Arroyo del Fresno, Madrid. Querían un amueblamiento versátil, que se adaptase a su estilo de vida y que les permitiese tener la casa en orden. Una de las premisas, por tanto, era aprovechar al máximo cada centímetro cuadrado. También buscaban personalidad y reflejar con el amueblamiento su propio estilo decorativo. Les echamos una mano en todas las estancias, pero hoy os contaremos nuestra intervención en la zona de día: el estar comedor y la terraza.
- Dificultades y puntos de partida:
Las dimensiones reales del estar-comedor habían variado respecto al plano de obra, en el que figuraba un mueble que separaba la puerta de acceso a la vivienda y el estar. Con las dimensiones reales eso ya no era posible. Este es uno de los problemas más comunes que solemos encontrarnos cuando hacemos interiorismo de vivienda y partimos de planos realizados por promotoras e inmobiliarias. No facilitan cotas y los muebles que se dibujan habitualmente no están a una escala correcta. En la mayoría de los casos que nos hemos encontrado nunca caben tantos muebles cuando se toman las medidas reales.
La proporción era mucho más cuadrada en la realidad, lo que dificultaba la distribución del mobiliario. Como ya te hemos contado en alguna otra ocasión, los salones que incluyen comedor son más sencillos de amueblar cuando son rectangulares. En esto influye la propia dimensión de las piezas más grandes (sofá, mueble de TV y mesa de comedor) y la distancia que separa el sofá del mueble de la TV. Dicha distancia no debe ser excesiva para que ver la televisión resulte cómodo. Si te resulta complicado amueblar tu salón, es muy probable que tengas este problema.
Necesidad de muchas plazas de sofá y de sillas de comedor. Como te decimos, se trata de una familia numerosa a la que le gusta hacer vida en común en el salón. El espacio disponible no es excesivamente grande, lo que nos obligó a tirar de ingenio para sacar el máximo partido a cada centímetro cuadrado. En salones pequeños, elegir bien las piezas es la clave del éxito.
Querían aprovechar la terraza y nos pareció buena idea considerarla casi como una continuación del estar. Cuidando el amueblamiento, podrían abrir de par en par la terraza en verano y aumentar el tamaño de su salón. Si vas a integrar la terraza y el salón, la clave es que los muebles se complementen. Deben funcionar bien de forma autónoma, pero también conjuntamente.
La casa no tiene recibidor y lo echaban de menos. A veces nos deshacemos de esta pieza buscando ganar metros y no nos damos cuenta de lo útil que resulta hasta que la perdemos. Para solucionar el problema, necesitaban un mueble que hiciera las veces de consola pero quedara integrado en la decoración del estar-comedor.
No querían muebles convencionales. Por ejemplo, buscaban no darle protagonismo a la TV para lo cual fue buena idea prescindir del mueble modular tipo. Tampoco el sofá o las sillas son convencionales.
- Soluciones.
Eran clave la toma de datos y la prueba de distribución del mobiliario. Teníamos que respetar las circulaciones de paso: el acceso a la zona de noche de la vivienda y la salida a la terraza.
Se hicieron pruebas sobre qué forma de sofá era la más conveniente; en L, con chaise-longue, con ottoman… Finalmente, nos decidimos por un sofá 3 plazas, con un ottoman a juego tapizado en gris y una butaca tapizada en mostaza. Uno de los elementos que elegimos como mesita de café, un tronco de madera maciza de teka, puede usarse también como asiento, en caso de visitas. La versatilidad de las piezas es fundamental cuando no sobra el espacio.
Elegimos una mesa de madera maciza de roble en acabado aceitado que además era extensible. La mesa combina perfectamente con el modelo de silla que gustaba a los propietarios, OMG de Zuiver. Un modelo escultórico y muy cómodo. Incluimos algunos modelos similares de la firma en otras estancias de la casa como el estudio o el tocador. De esta forma, en caso de visita, pueden extender la mesa y completar los asientos trayendo estas piezas ubicadas por toda la vivienda.
En una pared junto al armario de los abrigos, ubicamos el «recibidor». Lo configuran una consola de estilo vintage con un espejo redondo y algo de decoración. El punto ideal en el que dejar las llaves y pequeños enseres al entrar y salir de la vivienda.
Como mueble de tv propusimos una versión poco convencional; un mueble compuesto por dos estantes de madera maciza.
En la terraza requerían de una zona de estar y una mesa de comedor. Elegimos poner la mesa de comedor en la zona de la terraza que no se veía directamente desde el salón. Así las dos zonas de estar permanecían contiguas y podían usarse simultáneamente. En la zona exterior de estar buscamos un mueble cuyas dimensiones encajaran en el ancho de la terraza. Lo complementamos con un par de sillas de ratán y una silla Acapulco baby. Todos los modelos elegidos, tanto dentro como fuera, son de aspecto ligero para no masificar.
Como ves, había bastantes problemas pero conseguimos un resultado estupendo a pesar de las dificultades. A veces es sencillo amueblar. Otras, incluso aunque tengas muy claro lo que quieres, los condicionantes de partida complican el desafío. Para amueblar bien, no basta con tener estilo. Hay que manejar las claves y «escuchar» lo que el espacio nos pide.