La silla Swan fue diseñada, junto con la archiconocida Egg, por Arne Jacobsen, para el vestíbulo y áreas de descanso del Hotel Real de Copenhague, a finales de los años 50. Un clásico intemporal que se ha convertido en un icono retro de máxima actualidad.
La silla swan comparte con su hermana mayor el hecho de estar diseñada únicamente con líneas curvas y también, que Fritz Hansen las produzca desde que las ideó el arquitecto danés.
El asiento giratorio, lo podemos encontrar tapizado en piel y en distintos tipos de telas. La base siempre es la misma, de aluminio pulido satinado y en forma de estrella.
Es perfecta como asiento auxiliar en zonas de estar y dormitorios. En sus versiones más coloristas, pueden ayudarnos a dar un toque alegre a estancias monocromas. El precio de la versión original está entre los 3.000 € y 6000€ en función del tapizado, pero podemos encontrar versiones inspiradas a precios muy razonables, entre 280€ y 600 €.