Si las cocinas blancas no te desagradan pero te parecen sosas, has llegado al artículo correcto. Te dejamos una recopilación que no te puedes perder si quieres una cocina de color. Son tonos elegantes de los que no te cansarás.
Algunos consejos generales antes de lanzarte.
- A no ser que seas muy amante de colores como el rojo, el naranja o similar, te aconsejamos que los evites. Bajo nuestro punto de vista, cansan mucho antes. Ten en cuenta que invitan al movimiento y no transmiten calma o sosiego, que es lo que nos hace sentir más cómodos. Ya tuvieron su época y no fue muy gloriosa.
- Si tu cocina tiene mucha luz, puedes optar por colores clásicos con fuerza. Hablamos de tonos como el azul oscuro, el verde bosque o el gris. Si tienes poca luz y no quieres renunciar al color, también hay opciones. Los tonos verdes empolvados, los grises claritos o las maderas son opciones ganadoras.
- El color déjalo solo para los frentes de los armarios. Cuanto más neutra sea la encimera, mucho mejor. Lo de combinar dos colores también tuvo su época y tampoco nos ha dejado un buen recuerdo.
Cocina de color en tonos azules.
Hay muchos tipos de azules pero en cocinas, recomendamos apostar por tonos oscuros. Si tu cocina es longitudinal, instalar los muebles suspendidos de color blanco te ayudará mucho a que la cocina no se vea tan estrecha y rebajará considerablemente el «efecto tubo». En cocinas más amplias puedes seguir este mismo sistema o apostar por un «total look». En cualquier caso, si eliges que sea de dos colores, el claro siempre en la zona de arriba.
A estas cocinas le van genial los complementos dorados (tiradores, luminarias, etc.) y las encimeras blancas o de mármol tipo Calacatta.
Como ves en los ejemplos, en función del tipo de frente que elijas, conseguirás una imagen más clásica o más contemporánea.
Cocina de color en tonos verdes.
Cuando de verdes se trata, tenemos el corazón dividido entre los claros y los más oscuros. En cualquier caso, hablamos siempre de tonos un poquito empolvados, nunca de verdes demasiado vibrantes que pueden llegar a cansarnos fácilmente.
Los verdes también se llevan muy bien con los dorados y, desde nuestro punto de vista, admite bien los complementos de color negro mejor que el color azul.
Para las encimeras, más de lo mismo. Blancas o maderitas claras son un acierto seguro.
Cocina de color gris grafito casi negro.
Si te lanzas a una cocina oscura, debes poner especial atención al elegir el acabado. Si no quieres arrepentirte, debe ser necesariamente antimanchas y nunca brillante.
De nuevo, el diseño de los frentes puede recrear una cocina clásica o una totalmente vanguardista. Como ves en las imágenes, el grafito consigue su máximo esplendor en un ambiente muy luminoso y con detalles clásicos como molduras y suelos de madera.
En este caso, admite encimeras blancas, de madera, mármoles y también tonos oscuros. El total look en este caso nos encanta, pero solo es apto para estancias grandes y luminosas.
Otra opción colorida: la madera.
Todos tenemos en mente las de nuestra tía del pueblo y esa imagen puede que no nos seduzca demasiado. Hablamos de esas cocinas de aspecto retro «mal» que seguro que tienes en mente. Con un diseño minimalista, sin embargo, puede ser una apuesta segura. Elige bien la madera y no te cansarás fácilmente.
También es súper versátil. Se lleva bien con encimeras claras, oscuras y con todo tipo de mármoles. Solo tienes que tener un poco de cuidado con el mobiliario que la acompaña, especialmente si tienes un office o está integrada con el estar-comedor.
Se lleva genial con todo tipo de tiradores y electrodomésticos: dorados, cromados, negros, blancos…
Nuestros consejos más técnicos.
¿Has llegado hasta aquí y vas a lanzarte? estos son nuestros consejos como arquitectas:
- Con un presupuesto amplio, puedes lacar la cocina en el color de la carta RAL que más te guste. Si no es el caso, o prefieres tener una cocina más todoterreno, tendrás que patear varios distribuidores hasta dar con un color que te encaje. No es misión imposible, pero cuenta con que tendrás que adaptarte a la oferta de laminados que encuentres en el mercado.
- Integrar los electrodomésticos es siempre una buena idea. En las cocinas de color, más. Así tendrás libertad para elegir los tiradores y complementos. No tendrás que romperte tanto la cabeza a la hora de elegir unos electrodomésticos que se lleven bien con todo lo demás.
- Si te lanzas a por el color, especialmente si es oscuro, elige bien el tono de tus bombillas (unos 2700K) y asegúrate de tener suficientes luxes (no menos de 500).
Proyectos R de Room con cocina de color.
Te dejamos alguna de las cocinas que hemos diseñado últimamente con un toque de color. Muy pronto tendremos también en nuestro porfolio alguna gris oscura. ¡Estate atento!