Preparar un post con el «antes y después» de una reforma es siempre muy emocionante.
Detrás de las fotos con el resultado se esconde mucho trabajo, muchas expectativas, muchos problemas resueltos pero sobre todo, y eso es sin duda lo que más nos satisface, muchísimos sueños hechos realidad.
Cuando los propietarios de esta vivienda se pusieron en contacto con nosotras, la alegría que supone siempre la compra de una casa nueva se había disipado entre un montón de dudas. Con la venta ya cerrada, habían empezado a pensar en posibles redistribuciones y nada de lo que se les ocurría resolvía sus problemas. Querían una cocina integrada en el salón y soñaban con una casa espaciosa y llena de luz. La realidad sin embargo era bien distinta: un sistema estructural de muros de carga que había que mantener y 90 m2 construidos con los que empezar a trabajar.
Lo que para ellos era un obstáculo insalvable, suponía para nosotras la oportunidad de demostrar una vez más que, por difícil que sea el espacio que tengas, siempre siempre existe la posibilidad de mejorarlo.
Las fotos en este caso hablan por sí solas; aún así, no nos resistimos a contaros algunos detalles. Tras ver las primeras propuestas de distribución, los propietarios empezaron a respirar aliviados y se pusieron en nuestras manos. Aunque en principio no lo tenían previsto, además del proyecto de reforma nos confiaron el interiorismo de la vivienda. Pensar la reforma y el amueblamiento simultáneamente tiene muchas ventajas. Permite afinar mucho los espacios y sacarle el máximo partido a la iluminación, a los acabados y sobre todo al presupuesto. Coordinar y pensar todo desde el principio es, de hecho, la clave para tener una casa de revista. Ésta concretamente, fue publicada en Hola.com el pasado mes de agosto.
Hoy os enseñamos el salón. Como veis, se trata de un estilo nórdico soft, con algunos toques de madera como la mesa de comedor que dan calidez y «hogarizan» los espacios. Hay varias piezas clave como la estantería String y la silla Bertoia Diamond; ambos modelos resultan versátiles en su uso y su aspecto escultórico y alámbrico hace que el espacio no se sobrecargue y parezca más amplio. En general, todas las piezas son ligeras y se apoyan sobre patas. Eso permite ver todo el suelo; un truco que ayuda a que los espacios parezcan mucho más grandes.
¿Por qué conformarte con tener la casa que has comprado si puedes tener el hogar con el que siempre habías soñado?
Así era el salón…
Y en esto se convirtió…
